Le miro seria, preparada para evitar que se levantara de la camilla en lo que la enfermera tomara en aparecerse.
-Claro, solo un golpecito. La verdad es que no me afecta si te quedas con esa cara tan estupida por el resto de tu vida debido a la concusion, pero si te desmayas en la sala comun o algo peor pasa, sera a mi a quien le tocara solucionar el problema, asi que esperaras a que te revisen- cruzandose de brazos. La verdad no tenia ningun problema con su capitan, y aunque fuera una pesadilla para los prefectos aun asi le agradaba, pero era demasiado testarudo y aparentemente solo entendia a las malas.